Las infecciones virales, los alergenos, el humo del tabaco y los gases que contaminan el aire son los factores más comunes que desencadenan las crisis de asma, indicaron ayer varios informes médicos sobre esa enfermedad respiratoria que padecen cerca de 3 millones de argentinos.
Los distintos estudios que fueron hechos por la entidad Iniciativa Global para el Asma (GINA, por su sigla en inglés) y el Hospital de Clínicas ratificaron la necesidad de que los pacientes asmáticos cumplan con todas las indicaciones médicas, debido a que sólo el 25% de los afectados se trata adecuadamente.
La semana del control del asma comenzará en Argentina el 2 de mayo próximo, porque primero de mayo es el día mundial de esa patología. Este año, en los eventos de la semana participarán varios centros de salud que realizarán espirometrías y revisaciones clínicas gratuitas para detectar casos de asma.
El asma es una enfermedad de alta prevalencia que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), padece el 10 % de la población mundial y cuyas crisis agudas por falta de tratamiento insumen el 60 % de los recursos sanitarios destinados para combatirlo.
En realidad, se trata de una inflamación pulmonar crónica de los bronquios que produce una obstrucción de los mismos y que dificulta la respiración.
La médica Gloria Apelbaum, del Servicio de Neumonología del Hospital de Clínicas, explicó que "una crisis asmática se puede desencadenar por un pelo o secreción de animales, polen, polvo doméstico e infecciones virales".
La neumonóloga agregó que "también influyen en provocar esa situación los gases contaminantes y sobre todo el humo del tabaco".
Reiteró la importancia de hacer un tratamiento con drogas "preventivas y de alivio" y consideró, que el uso del aerosol "es la vía ideal de entrada al organismo" de la medicación.
Los síntomas predominantes del asma incluyen tos o sibilancias, el sentir opresión en el pecho y la dificultad para respirar, que afecta significativamente la calidad de vida del paciente.
El informe de la GINA destacó que el control del asma requiere un enfoque combinado porque es preciso educar a los pacientes para que manejen su enfermedad y también, es indispensable seleccionar los medicamentos adecuados.
Control
Los especialistas consideran que un paciente que pueda identificar y evitar los factores desencadenantes de sus crisis asmáticas y que siga el tratamiento según las indicaciones del profesional podrá lograr un buen control de la enfermedad.
Generalmente se utilizan dos tipos de medicamentos para tratar el asma: los denominados de alivio rápido o rescatadores cuando hay una crisis y de control a largo plazo o controladores.
El Día Mundial del Asma se conmemorará este año bajo el lema "Vos podés controlar tu asma" y además de la educación sobre la enfermedad, las organizaciones mundiales harán hincapié en el correcto uso de elementos como los aerosoles para medicarse.
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